Existe un amplio debate en cuanto al momento correcto, o para optimizar los beneficios, para la realización de estiramientos, bien antes o después de la práctica deportiva; así como numerosos estudios que respaldan ambos momentos de estiramientos. Pero los avances científicos se inclinan hacia la incorrecta realización previa de estos estiramientos antes del ejercicio o actividad física, pese a su tradición especialmente en deportes colectivos, favoreciendo los estiramientos post-ejercicio para obtener los beneficios reales de un estiramiento de calidad.
¿PARA QUÉ SIRVEN LOS ESTIRAMIENTOS?
Uno de los errores más comunes que podemos observar en las personas que realizan algún tipo de ejercicio físico, sobre todo si están empezando, es excluir de su rutina una parte importante de la sesión como es la vuelta a la calma, en la que deben incluirse de forma imprescindible al menos 10 minutos de estiramientos. Entre la literatura existente hemos encontrado un gran número de beneficios que nos aporta el momento del estiramiento, destacando los siguientes:
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Aumentar o recupera flexibilidad, una de las capacidades físicas con menos margen de mejora una vez acabada la adolescencia.
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Mejora la coordinación de los movimientos
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Mejora la circulación sanguínea
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Disminuye la tensión muscular
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Disminuye la rigidez articular
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Mejora la postura
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Previene lesiones, como sobrecargas musculares
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Mejora el conocimiento de tu propio cuerpo
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Mejora el rendimiento
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Al finalizarlos obtienes una agradable sensación de bienestar y relajación
Si has formado parte de algún equipo y has tenido una rutina de entrenamiento planificada a lo largo de una temporada antes de los últimos 10 años, recordarás que el estiramiento siempre ha formado parte del calentamiento de cada sesión, así como de su parte final antes nombrada, la vuelta a la calma. Pues bien, los estudios más recientes recomiendan no estirar antes de realizar esa sesión o en su defecto cualquier tipo de ejercicios o actividad física, esté o no incluida en un deporte. Estos estiramientos iniciales estaban fundamentados principalmente en la afirmación de que prevenía el riesgo de lesiones, hecho que han demostrado recientemente que no es así; también está demostrado que reduce tanto el rendimiento de fuerza, como de la fuerza explosiva y la resistencia debido a la baja temperatura inicial de los músculos y su alta exigencia en cuanto a intensidad en los estiramientos.
«DE ACUERDO, ESTIRAR DESPUÉS DE ENTRENAR ES BUENO, PERO JUSTO DESPUÉS DEL ENTRENAMIENTO O SINO CUÁNDO DEBO HACERLO?»
Por lo tanto, concluimos afirmando que se debe estirar siempre después de realizar cualquier tipo de ejercicio físico, no necesariamente inmediatamente después.
-En actividades aeróbicas: por ejemplo si realizamos una carrera de larga duración se deberían realizar justo después de la misma al igual que si realizamos ejercicios físico de intensidad moderada, ya que es en ese momento es cuando los músculos tienen características tales como una alta temperatura o un mayor tono muscular, y el proceso de estiramiento puede albergar su principal función de reducir o prevenir lesiones musculares al mismo tiempo que completan la fase de vuelta a la calma ofreciendo todos los beneficios enumerados arriba.
-En actvidades y ejercicios anaeróbico y con intensidad máxima y/o larga duración dónde existe un gran trabajo muscular: cuándo hacemos un entrenamiento con electroestimulación hacemos una actividad de alta intensadad, en general anaeróbica y con una gran intensidad, o cuando hacemos los entrenamientos o partidos de deportes de equipo, existen estudios que afirman que es aconsejable realizar los estiramientos a partir de 30 minutos una vez acabado el ejercicio.
